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miércoles, 19 de enero de 2011

La Orquesta de París, con Sibelius, en el Auditorio de Madrid



Pocas piezas musicales me transportan a un paisaje tanto como esta magnífica Sinfonía num. 2 de Sibelius. Escuchad este fragmento del cuarto movimiento. Os aconsejo cerrar los ojos y dejaros llevar. Montañas, lagos, bosques finlandeses. La transparencia del aire, el viento en las montañas, entre los árboles, el cielo limpísimo. La música barriendo la tierra y elevándose. Ojalá tuviera palabras ... Esto escuché ayer en el Auditorio, interpretado por la Orquesta de París dirigida por Paavo Järvi. Además, la Obertura de El Corsario de Berlioz y el Concierto para piano y orquesta num. 2 de Tchaikovski, que cuenta con un segundo movimiento precioso, un diálogo entre el primer violín y el primer chelo. Denis Matsuev, al piano. Pero cuando, en la segunda parte, aparece la 2ª Sinfonía de Sibelius todo desaparece.

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