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Esto ocurre porque esto es una teocracia encubierta (?), no menos fanática ni menos arcaizante que la que gozan en tierras de ayatolás. La apariencia de mayor anacronismo de la asiática estriba en que allí visten chilaba y turbante y aquí Armani y corbatas de cien euros. Otra diferencia con Irán es que, allí, los extintos partidos de la izquierda eran laicístas, mientras que, aquí, nuestros "socialistas" no han osado tocar un pelo de sobrepelliz parroquial, mucho menos la filigrana de las casullas episcopales. Y no solo han mantenido los privilegios que el Felón galaico les retribuyó en pago de los favores recibidos, sino que les engordaron obscenamente la bolsa a expensas del erario público. Si alguien hablaba con ellos de denunciar el Concordato era mirado con desconfianza, como sospechoso revolvín de las calmas aguas bautismales; temerario revisionista de la Historia que osaba jugar con cosas que podían incomodar gravemente a señores con mucho poderío: un insensato, que diría Bono. Eso, digo, los "socialistas", que lo que eran los herederos de la finca..., a qué contarlo. Si, colegas, hoy nos gobiernan las huestes de un baturro amanerado e insoportable que gustaba de contonearse en un escenario con los hombretones del parné mirándole arrobados desde abajo. País.
Te veo muy soliviantado. Yo pensé que esta viñeta de El Roto te traerían recuerdos de la Arcadia, de momentos plácidos bajo el corredor, con un libro y un buen vino en los labios. Ha llegado la primavera, Federido. Goza. Muchos besos
Esto ocurre porque esto es una teocracia encubierta (?), no menos fanática ni menos arcaizante que la que gozan en tierras de ayatolás. La apariencia de mayor anacronismo de la asiática estriba en que allí visten chilaba y turbante y aquí Armani y corbatas de cien euros. Otra diferencia con Irán es que, allí, los extintos partidos de la izquierda eran laicístas, mientras que, aquí, nuestros "socialistas" no han osado tocar un pelo de sobrepelliz parroquial, mucho menos la filigrana de las casullas episcopales. Y no solo han mantenido los privilegios que el Felón galaico les retribuyó en pago de los favores recibidos, sino que les engordaron obscenamente la bolsa a expensas del erario público. Si alguien hablaba con ellos de denunciar el Concordato era mirado con desconfianza, como sospechoso revolvín de las calmas aguas bautismales; temerario revisionista de la Historia que osaba jugar con cosas que podían incomodar gravemente a señores con mucho poderío: un insensato, que diría Bono. Eso, digo, los "socialistas", que lo que eran los herederos de la finca..., a qué contarlo.
ResponderEliminarSi, colegas, hoy nos gobiernan las huestes de un baturro amanerado e insoportable que gustaba de contonearse en un escenario con los hombretones del parné mirándole arrobados desde abajo.
País.
Te veo muy soliviantado. Yo pensé que esta viñeta de El Roto te traerían recuerdos de la Arcadia, de momentos plácidos bajo el corredor, con un libro y un buen vino en los labios. Ha llegado la primavera, Federido. Goza. Muchos besos
EliminarLa verdad es que este comentario iba destinado al post de Groucho.
ResponderEliminarSorry.