El San Petersburgo de Crimen y Castigo

Se detuvo, perplejo, en la puerta cochera. Salir así, pasear, le resultaba desagradable; volver a su habitación, aún peor. "Qué oportunidad tan magnífica perdida", murmuró mientras se hallaba detenido frente a la puerta abierta de la portería. De repente, se estremeció. En la pequeña habitación, a dos pasos de donde él se hallaba, bajo una banqueta, a la derecha, algo brillante le llamó la atención.... Se abalanzó sobre el hacha ( tal era lo que brillaba) y la cogió de debajo de la banqueta.

Raskolnikov ya tiene el arma. La maldición está a punto de caer sobre él. Crimen y castigo. Dostoyevski.





Este es el portal, esta la casa, esta la calle. Storlyarni nº 9. De aquí sale Rodia camino de la casa de la vieja avara. En San Petersburgo a través de los portalones se accede a unos patios interiores donde se encuentran las puertas de las viviendas. En un desván del portal interior nº 2 vive nuestro hombre. Las fachadas interiores poco tienen que ver con el aspecto de la exterior. En estas dos fotos podeis comprobarlo.
































La puerta de la izquierda, cerrada con un candado, corresponde a la habitación que ocupaba en la pensión, y este el primer tramo de escaleras que tuvo que descender. En ella se encuentran estos grafitis. Rodia no mates.


Recorre esta calle, muy cercana a la plaza Sennaya, enajenado. Lleva el hacha oculta en la chaqueta. Camina hacia el canal Griboedova y lo cruza por el puente Kokushkin.

El camino que elige Rodia es tortuoso. No quiere que nadie le vea, prefiere dar un rodeo. Tras cruzar el canal hay que dirigirse hacia Sadovaya, luego girar a la derecha. Se camina por Rimskogo-Korsakova, se cruza Voznesensky y se continua hasta la Bolshaya Podyacheskaya ul y Srednyaya Podyacheskaya. El edificio de la prestamista se encuentra entre el dique del canal y estas dos calles. La entrada al patio del edificio está un poco más hacia el norte, en el dique de Griboedova 104. Se entra por un túnel húmedo y oscuro, lleno de baches, y hay que continuar recto hasta la entrada del nº 5. Las dos imágenes siguientes corresponden al portal y a la casa.















Se introduce en el portal sin que nadie le vea, sube las escaleras, accede a la vivienda y perpetra su doble asesinato. Luego atraviesa a toda prisa el túnel que conduce a Srednyaya Podyacheskaya. Y huye.

Estamos en el barrio Sennaya, en los alrededores del antiguo mercado del heno. En el siglo XIX esta era una de las zonas más pobres de San Petesburgo, un suburbio sucio y miserable, lleno de fétidas tabernas y personajes oscuros. Estas eran las calles que frecuentaba Dostoyevski y en ellas se inspiró para escribir Crimen y Castigo. Desde 1861 a 1867 vivió aquí, en dos apartamentos en la misma calle Kaznacheyskaya, en el número 1 y en el número 7, y en este último escribió la novela.












Hoy sigue siendo un barrio marginal. Al atravesar sus portalones te adentras en otro mundo, con suciedad acumulada en los rincones, embarrado, las paredes descascarilladas, y un olor a veces nauseabundo. Y gatos por todas partes. A San Petesburgo le han lavado la cara, y es una ciudad tan hermosa que necesita poca cosa para deslumbrar. A los lados de los canales se suceden palacios y edificios nobles, uno tras otro, vayas donde vayas. Desde fuera tal magnificencia te fascina. Pero si te atreves a traspasar el umbral de cualquiera de estos maravillosos edificios, se te cae el alma a los pies.
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