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lunes, 31 de octubre de 2011

La Granja de San Ildefonso


El Palacio de la Granja de San Ildefonso está enclavado muy cerca de la Sierra de Guadarrama, en Segovia, un precioso paraje boscoso que ya los reyes de Castilla, en la Edad Media, utilizaban como coto de caza. Cuentan que hacia 1717 Felipe V, disfrutando de una montería por esta zona, se enamoró de esta tierra y la eligió como retiro y lugar de descanso. Felipe V era un hombre flemático, piadoso, amable, introvertido, inteligente y muy aficionado a la caza y la vida al aire libre. Así que, en 1718, compra los terrenos y proyecta construir el Real Sitio rodeado de fastuosos jardines. Las obras comienzan en 1720 y concluyen tres años después; el 15 de agosto de ese año se anuncia que "el rey ha resuelto volver a este Sitio desde El Escorial el día 9 del próximo mes de septiembre e ir a habitar con la reina a esa Granja ..., que el Palacio y la Casa de Oficios esté concluido, desembarazado y limpio."
















En la Galería de Retratos de Palacio encontramos estos dos retratos de Felipe V y su mujer, Isabel de Farnesio, realizados por Louis-Michel van Loo en 1737. A la muerte del rey subió al trono Fernando VI, hijo de Felipe V y su primera esposa, María Luisa de Saboya, que no profesaba gran estima a su madrastra, concluyendo en invitarla a abandonar la corte. Isabel se trasladó a vivir al Palacio de La Granja y comenzó a construir el vecino Palacio de Riofrío ( del que os hablaré más adelante) con el objetivo de fijar allí su residencia. La muerte de Fernando VI y el advenimiento al trono de España de su hijo Carlos III le permitió volver a la Corte y el Palacio de Riofrío nunca llegó a ser habitado. El Real Sitio de la Granja recobró todo su esplendor.













Los jardines del Real Sitio son una belleza y ocupan una enorme extensión a los pies del palacio. "Si uno de va a vivir al campo", sostenía Dézallier, el gran teórico francés de la jardinería, "es para poder tener un jardín más vasto y magnífico. En ese caso lo mejor es contentarse con una casa pequeña, acompañada de un gran jardín". Así se hizo en La Granja. El Palacio es precioso pero de unas dimensiones acogedoras, mientras es fácil perderse por los jardines, en los que se alternan zonas urbanizadas, de paseos y fuentes, con otras boscosas. La abundancia de agua permitió al monarca diseñar un jardín con un gran número de fuentes monumentales con bellísimos surtidores y juegos de agua, que por desgracia no funcionan más que en verano y mi visita otoñal no me permitió contemplar.

























Como veis, los jardines están salpicados de estatuas, muy del gusto francés, obra de los artistas René Frémin y Jean Thierry.













El Palacio consta de dos plantas: en la primera, centrado, coincidiendo con el eje que marca la cascada que veis en la fotografía con la que abro el comentario, el Dormitorio real, que os muestro más abajo. En contra de la costumbre de otros monarcas, Felipe V e Isabel de Farnesio compartían habitación, aunque cuando la reina enviudó se acondicionó una sala contigua como su dormitorio. La Pieza de la cama de repuesto.

















El oratorio
, antiguamente llamada "Pieza donde se dice misa", que os muestro abajo a la derecha, se adorna con cuadros de temática religiosa: San Antonio y San Joaquín con la Virgen, de Paolo de Metteis; Santa Catalina de Maratta, San Jerónimo de Mattia Pretti, una Cabeza de anciano, de Sacchi y una preciosa Asunción de la Virgen de Caracci, entre otros. También preciosas consolas de estilo Luis XIV y un oratorio portátil que perteneció a Fernando VI. Muy cerca, la llamada Pieza de comer, llamada también Pieza de adorno de estuco, donde almorzaban los soberanos cuando no tenían invitados. En sus paredes cuelgan naturalezas muertas, adquiridas por la reina en Sevilla.














Al lado de la llamada Pieza de la cama de repuesto nos encontramos con el Gabinete de la Reina, una habitación cuadrada cuyo fresco del techo os muestro abajo a la izquierda. Se trata del Regreso triunfal de Jasón y Medea, obra de Giacomo Bonavía. Todas las pinturas de techos y bóvedas son una belleza. A la derecha, la Transformación de Calisto en Osa Mayor, firmado por Bartolomeo Rusca, en la Galería de Retratos.





















La decoración del Comedor real no pertenece a esta época. La antigua cámara de Felipe V, denominada también Pieza grande de azulejos, sufrió varias transformaciones. De estilo fernandino, destaca la imponente mesa de caoba de Brasil. A la izquierda, un detalle de la Sala de Lacas, muy apreciada por la reina.














La planta baja está concebida como una galería para pasear, con grandes ventanales y puertas al jardín, una sucesión de salas donde los reyes albergaron su colección de esculturas. Esta colección se formó con piezas heredadas, pero también con compras por parte de los reyes de algunas colecciones del siglo XVII, como la del Marqués de Carpio y, sobre todo, la de la reina Cristina de Suecia. Podemos verlas en las impresionantes Sala de la Victoria y Sala de Europa, que os muestro a continuación.

















En una pequeña sala se encuentra la Fuente de Galatea, llamada también de Las Conchas, obra de Jean Thierry, donde aparece Anfitrite bañándose. La pintura que la adorna, firmada por Bonavía, está realizada al temple en 1736 y es la más antigua del Palacio. A la derecha, la Tribuna Real sobre el coro de la Colegiata, una maravilla realizada por Teodoro Ardemans.













Me encantó el Real Sitio, su palacio y jardines. Bien merece una visita.



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domingo, 30 de octubre de 2011

"El cielo a medio hacer", de Tomas Tranströmer


Madrigal

"Heredé un bosque oscuro al cual rara vez voy. Pero llegará el día en que muertos y vivos cambien de sitio. Entonces, el bosque se pondrá en movimiento. Aún nos queda esperanza. A pesar del trabajo de numerosos policías, el crimen más grave queda sin resolver. Del mismo modo, hay en algún lugar de nuestras vidas un gran amor sin resolver. Heredé un bosque oscuro, pero hoy camino por otro bosque, el claro. ¡Todo lo viviente que canta serpea se sacude y repta! Es primavera y el aire es muy intenso. Me he graduado en la universidad del olvido y tengo las manos tan vacías como la camisa que cuelga en la cuerda."

Ya tengo en mis manos El cielo a medio hacer, una suerte de antología poética del último Nobel de Literatura, Tomas Tranströmer, del que nada sabía. Incluye también un conjunto de haikus y su autobiografía, un texto que no podéis perderos. Voy desgranando poemas, lentamente. Su poesía es clara y honda, poblada de imágenes.

Lila Downs, "Un Poco Mas"

sábado, 29 de octubre de 2011

Julio Cortázar, un beso


Leyendo hace unos días en un semanario un reportaje sobre los besos, recordé un capítulo de Rayuela, la maravillosa novela de Cortázar, que tiene la descripción más hermosa de un beso que he leído nunca. Busco en mi biblioteca y encuentro el libro, un ejemplar editado por Edhasa y que adquirí en 1980 al precio de 250 ptas. Hace 31 años. Está destrozado, prácticamente desencuadernado. Desde hace unos años me dedico a comprar nuevas ediciones de libros a punto de desintegración que atesoro desde hace décadas. Los coloco al lado de su hermano mayor, el que aún goza de "todas mis complacencias". Tendré que hacer lo propio con este.

"Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mi para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua."

viernes, 28 de octubre de 2011

"En la nube", en la Casa de los Picos

La American Hardwood Export Council, la asociación americana para la promoción de la madera de frondosas estadounidenses, ha participado en la VI edición del Hay Festival Segovia, recientemente clausurado, con la exposición Diseño e innovación con madera organizada en la Casa de los Picos. Paseando por la calle Juan Bravo segoviana, me encuentro con la exposición.













Esta preciosa casa, así llamada por las puntas de diamante que rematan los sillares de su fachada, fue construida en el siglo XV por don Pedro Löpez de Ayala, conde de Fuensalida. Más tarde fue adquirida por los caballeros del linaje de la Hoz, cuyo escudo se puede ver sobre la puerta. Según la tradición, fueron estos últimos los que decidieron cubrir su fachada con las puntas con el fin de hacer olvidar el nombre de "casa del judío" con el que era hasta entonces conocida. Hoy es la sede de la Escuela de Artes aplicadas y Oficios artísticos.

Como antesala de la exposición se ha instalado una zona de bar llamada En la nube. Bar en tulipwood estadounidense, diseñada en madera por el arquitecto japonés Sou Fujimoto. En ella, diez bloques de madera maciza parecen flotar en el espacio sobre pedestales transparentes. Me encanta la madera, tu textura, su calidez, sus tonalidades, y estos bloques invitan a ser acariciados. En el interior, varias piezas creadas con estas maderas, entre ellas el precioso diseño de sillón de lectura con el que abro el comentario.

José Antonio Martínez Camino

"Es necesario tutelar el derecho de los españoles a ser tratados por la ley como esposo y esposa, en un matrimonio estable, que no quede a disposición de la voluntad de las partes ni, menos aún, de una sola de las partes. Son también peligrosos y nocivos para el bien común ordenamientos legales que no reconocen al matrimonio en su ser propio y específico, en cuanto unión firme de un varón y una mujer ordenada al bien de los esposos y de los hijos".

Declaraciones del portavoz de los obispos, Martinez Camino, recogidas por el diario El País el 22 de octubre, sobre la orientación del voto en las próximas Elecciones Generales.




"Es mejor estar callado y parecer tonto que hablar y despejar las dudas definitivamente"

jueves, 27 de octubre de 2011

Museo Esteban Vicente, en Segovia


Hace unos días os hablaba de la espléndida exposición de la obra del pintor segoviano Esteban Vicente con la que inauguraba temporada la galería Elvira González de Madrid. Esteban Vicente quizá sea la mejor muestra del expresionismo abstracto con la que contamos en España, el hombre que hizo poesía con sus pinceles, que aportó un lenguaje plástico a la Generación del 27. Perteneció al círculo de García Lorca, Juan Ramón Jiménez, Buñuel y Alberti. Después, en París, conoció las vanguardias y trató a Picasso, Dufi y Max Ernst. Pero la culminación de su obra se produjo en Estados Unidos. En Nueva York trabó amistad con Rothko, De Kooning, Pollock, Kline y Newman y su estilo, lleno de sutileza y lirismo, evolucionó hacia el expresionismo abstracto.













Su pintura siempre me ha conmovido, y la exposición en la Elvira González renovó mi interés por conocer el Museo que la ciudad de Segovia le ha dedicado. Cualquier excusa es buena para volver a esta maravillosa ciudad, así que allá fui y disfruté de una preciosa exposición, Improvisaciones Concretas: Collages y Esculturas. El Museo se ubica en el antiguo Palacio del rey Enrique IV, de 1455, un edificio precioso que comprende también el Palacio de la reina Doña Juana y una serie de viviendas contiguas, en proceso de restauración.














En 1518, Pedro López de Medina y su mujer, Catalina de Barros, fundaron en lo que había sido palacio un Hospital de Viejos, al que pertenece la capilla renacentista con el artesonado mudéjar que os muestro en la fotografía de la derecha, hoy utilizada como auditorio.















La exposición recoge sus Improvisaciones concretas, como él las denominó, realizadas desde los años 40 hasta poco antes de su muerte, en el 2001, a los 98 años. Me emocionó especialmente su última obra, en la que se aprecia el temblor en la firma, unos cuadros luminosos, abiertos, paisajes del alma como los ha calificado algún crítico. Recuerdo especialmente uno que no puedo mostraros (no lo encuentro ni en los libros ni en la red, y allí solo pude hacer un par de fotos antes de que me descubrieran), blanco sobre blanco, una pintura de una belleza conmovedora.













De sus collages dijo De Kooning: " Los collages de Vicente son curiosamente fluidos y dinámicos. El color y las formas consiguen dar una sensación de movimiento ininterrumpido, solapándose, cambiando posiciones, prolongándose infinitamente."


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miércoles, 26 de octubre de 2011

La judería segoviana


Quizá la judería segoviana no sea tan espectacular como la de Toledo, pero este dédalo de plazas y callejuelas conforman un barrio con un encanto especial, en el que resulta fácil que la imaginación viaje a otras épocas en las que los hijos de Sión configuraban uno de los grupo socio-económico más poderosos e influyentes de este país. Su expulsión y la confiscación de sus bienes, por orden de los Reyes Calólicos en 1492, les obligó a abandonar casas y haciendas y dejar atrás una tierra que había sido su hogar durante siglos. Decisión que fue aplaudida por nuestros vecinos europeos como signo de modernidad. Francia, Austria e Inglaterra nos habían precedido.


















El barrio de la Judería Vieja se encuentra junto a la Sinagoga Mayor, hoy iglesia del Corpus Christi, perteneciente a un convento de monjas clarisas. Fue construída en el siglo XIII y convertida en templo cristiano tras la expulsión de los judíos. Su interior conserva arcos de herradura, paredes encaladas y celosías de madera. También encontramos los mismos arcos en muchas otras fachadas, arcos que fueron revocados por los cristianos cuando ocuparon las casas judías, con la finalidad de hacer olvidar su origen.























El eje del barrio era la calle Mayor, que lo atravesaba de oeste a este y que en la actualidad corresponde, en parte, a la calle Judería Vieja. Si continuamos por esta calle llegamos a la calle Puerta del Sol, que descendía al Postigo de la Judería, situado en la muralla y que os muestro en la imagen superior derecha. En el número 14 de la calle Judería Vieja se encuentra la Casa-palacio de Abraham Senneor, Juez Mayor de las aljamas de Castilla y Arrendador mayor de las Rentas Reales, hombre ilustre y poderoso que se vio obligado a convertirse al cristianismo para no verse expulsado de la ciudad. Esta preciosa casa hoy es sede del Centro didáctico de la Judería. Podéis ver su patio central en la fotografía de la izquierda.














Frente a la judería, extramuros, a orillas del río Clamores, se encuentra el cementerio judío. Entre pinos, las huellas de los enterramientos con las tumbas al descubierto.















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