Este cuadro tiene por título La ronde circle au bord du Pacifique, y pertenece al pintor peruano Herman Braun-Vega. Fue realizado en 2010, de manera que pertenece a la colección más reciente de su autor. No conocía su obra, este ha sido el primer cuadro firmado por él al que he tenido acceso. Según reza en el catálogo que ha caído en mis manos, reside en Francia, dónde intermitentemente se dedica al diseño (algo en su pintura lo confirma, ese interés icónico), y ha expuesto en España en alguna ocasión, aunque no especifica dónde ni cuándo.
Me atrae el diálogo que establece entre pinturas de distintas épocas y estilos, y la originalidad con la que recrea estas composiciones. En el cuadro superior, este se establece entre Ingres, Matisse y Picasso. En el inferior, Double éclairage sur l'Occident, perteneciente a 1987, entre Velázquez y Picasso.
Su obra tiene frescura y ese sincretismo que nace del mestizaje de culturas y estilos. Nos acerca la pintura de los grandes y, de alguna forma, nos revela sus secretos al despojarla de su "respetabilidad". La composición de Las meninas, el estudio de la luz. En alguna medida me recuerda al Equipo Crónica.
"En attendant", 1984. Su particular lectura de Manet y Monet. Un cuadro delicioso.
Y este Norte Sur, jugando con la Olympia, de Manet. O La Llama en la brasilera realizado también en el 84, esta vez con Vermeer y su Mujer joven con cántaro de agua.
Resultan especialmente interesantes sus retratos. Lástima que se prodigue poco en nuestro país.
"Siempre nos quedará...Perú". Una asignatura pendiente que todos debieran "reparar".
ResponderEliminarAllá se tropieza con sorpresas como ésta...
Una golondrina no hace verano, cierto. Allá hay muchas...
Oquendo, Chabuca, Cesar Calvo...
Buen viaje por ese país.
Faltó el ceviche.
"Antes de quitarme la venda me descubrirás el mar. Luego, cuando yo lo vea con mis propios ojos, sabré si puedo amarte o no."
Al quitarte la venda...seguro llegarás a amarlo.
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ResponderEliminarUna relectura de los pintores clásicos fascinante, que sólo se puede entender en reposo de ánimo, en silencio. En ese silencio íntimo, activo. Porque el silencio y sólo el silencio es reposo.
ResponderEliminarCuanto nás observo estos cuadros más se afianza en mi la máxima de que "el verdadero criterio del arte es la memoria".
ResponderEliminarPD. No consigo poner mi nombre en presente el comentario, como tampoco lo conseguí en el anterior, por eso me identifico: Carlos J. Suárez
Gracias, Carlos, por visitar Mi casa y por tu amor a los clásicos. Espero verte a menudo por aquí y contar con tus comentarios. Un abrazo
Eliminar"El mundo es ancho y ajeno"; no podemos dominarlo, pero sí tenerlo presente en nuestra memoria.... Eso es lo que he visto siempre en esos cuadros.
ResponderEliminarCarlos
Un maestro, versátil, excelente compositor visual y de capítulos interesantes a lo largo de su trayectoria plástica. Yo tengo el catálogo de su exposición en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid en 1992. Saludos. Felipe Mayuri Poma
ResponderEliminarCon los encuentros imposibles entre distintas épocas que realiza este peruano, se convierte a lo extraordinario que antes era el arte, en una simple rutina sin distinción y sin substancia. Una obra hecha sin expectativas no es arte, sólo se transforma lo que antes era sublime en una simple mezcla vacía de contenido.
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