Viernes Santo, Valladolid. Nuestra Señora de las Angustias, una de las magníficas tallas de Juan de Juni, pasea por las calles de la ciudad castellana rodeada de silencio. En Valladolid, las procesiones de Semana Santa son, al margen de su significación religiosa, un acontecimiento cultural de primer orden. Muchos de los tesoros que custodia el Colegio San Gregorio (la colección de tallas barrocas más importante del país) salen a la calle, portadas en andas por los cofrades de cada Hermandad y convierten la ciudad en un museo al aire libre.
La Virgen Dolorosa ha sido representada en tallas prolicromadas por los grandes imagineros españoles. La que os ofrezco en las fotografías es obra de Juan de Juni, Nuestra Señora de las Angustias. Y a la derecha, otra escultura magnífica, esta vez de Gregorio Fernández, el Cristo de la Luz.
En la tarde del Viernes Santo tiene lugar la Procesión General de la Sagrada Pasión en la que participan todas las cofradías vallisoletanas acompañando a 32 pasos. En ella se representa la pasión completa de Cristo, desde la última cena hasta la soledad de la Virgen. Una extraordinaria exposición de obras maestras de la imaginería.En el vídeo, el Cristo de la Buena Muerte, también de Juan de Juni.
De acuerdo con la visión del arte religioso que tanto impregna la cultura de este país. Y respeto, desde el ateismo, toda todo tipo de fé, confesión, religión y hasta la mas angustiosa sensación de los que se sienten pecadores.
ResponderEliminarClaro que todo esto hoy no resulta más que una parafernalia decadente para frivolidad ociosa de quién no sabe a que dedicarse. Y en el fondo reside el más rancio costumbrismo y el negocio. Pero de la filosofía de Jesús de Nazaret, nasti de plasti.
María.