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domingo, 15 de agosto de 2010

La Virgen en la imaginería del XVII

























Hoy, 15 de Agosto, se celebra el día de la Asunción de la Virgen en varias localidades españolas. En Madrid nos encontramos en plenas fiestas de la Virgen de la Paloma. Distintos nombres para la misma mujer, que ha protagonizado algunas de las más bellas pinturas y esculturas en la historia del arte.

En España contamos con extraordinarias tallas en madera dedicadas a la Virgen, realizadas por los mejores maestros de la imaginería. Abro este comentario con dos imágenes de la Inmaculada Concepción, realizada hacia 1628 por Juan Martínez Montañés, que se encuentra en la iglesia de la Anunciación, en Sevilla. Me gusta este rostro sereno, reflexivo, sin esos rasgos aniñados y pudibundos que encontramos en otras imágenes con la misma temática.

Esta preciosa imagen representa a la Virgen de la Soledad, y fue realizada por José de Mora en 1671. Parece como si ambos artistas hubieran elegido a la misma modelo para realizar ambas tallas. El parecido es enorme, pero la expresión no puede ser más distinta. La Soledad refleja una desolación conmovedora. No se rebela, mantiene esa expresión dulce y sosegada de la Inmaculada, pero se palpa su dolor.

Esta Dolorosa está firmada por Pedro de Mena en 1670-5. Preciosa pieza en la que subsiste el parecido y esa maestría para lograr el verismo deseado. Escribió San Juan de la Cruz en La subida del Monte Carmelo: El uso de las imágenes para dos principales fines le ordenó la Iglesia, es a saber: para reverenciar a los santos en ellas, y para mover la voluntad y despertar la devoción por ellas a ellos; y cuanto sirven de esto son provechosas y el uso de ellas necesario. Y, por eso, las que más al propio y vivo están sacadas, y más mueven la voluntad a devoción, se han de escoger.


Pero quizá la talla de este período que más me guste sea esta Mater Dolorosa de José de Mora, realizada entre 1680 y 1700. Me entusiasma su sencillez, su naturalidad, y la hondura de esa pena que con tanta sutileza expresa su rostro. Una belleza.

1 comentario:

  1. Y pregunto yo...
    por qué todas las vírgenes tienen la cara tan triste?
    Entre tanta "Mater dolorosa" es que no existe imaginería religiosa de "Mater gozosa"?
    No se si esta "advocación mariana" es correcta...
    Es solo una pregunta...
    Por lo demás...
    Excelente "post"

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