Banksy, grafitero, una leyenda urbana.

Desde cuándo el grafiti se considera arte? A partir de qué momento una actividad casi subversiva, propia de la marginalidad, considerada por la sociedad bien pensante como "vandálica" ha pasado a despertar el interés de las galerías de arte y los museos? Basquiat protagoniza una gran exposición en Basilea. Ahora Banksy. Quizá la explicación sea, en el caso de estos últimos, su renuncia a seguir siendo considerados "templos sagrados", lugares de culto para una minoría de entendidos y amantes de la belleza, en la acepción más convencional de la palabra, con la ambición de abrirse al gran público y convertirse en reflejo de la sociedad. Lo ignoro, pero el hecho es que cada vez más a menudo lo marginal pasa a considerarse el no va más del buen gusto burgués.
















Aquí tenemos a Banksy, el gran provocador, despertando la irritación de los ingleses con sus imágenes irreverentes tapizando paredes y tapias. Nada se libra a su sarcasmo, muy al contrario. Las instituciones y creencias más genuinamente inglesas son el objetivo fundamental de sus mofas. Y el "establishment" británico paga cantidades exorbitantes por sus obras, que se venden en galerías de arte y se disputan en las subastas más exclusivas.

















Pero lo curioso del caso es que nadie parece haber visto al tal Banksy, nadie sabe cuál es su aspecto, su edad, ni siquiera su sexo. Y la imaginación se ha echado a volar. Algunos aseguran que se apellida Banks y que nació en Bristol en 1974. Otros dicen que es un rapero treintañero agujereado de percings. Incluso se ha publicado la fotografía que reproduzco sobre estas líneas, tomada con un teléfono móvil, en la que el supuesto Banksy hace de las suyas. Siguiendo el trazo de una línea de tráfico amarilla pinta una flor en una tapia, junto a un pintor de brocha gorda.

Y la doncella escondiendo la basura detrás de la tapia?

Ahora Banksy vuelve a ser noticia porque un millonario americano, llamado Thierry Guetta, ha decidido convertirlo en protagonista de un documental que promete ser la estrella de la próxima edición del festival de San Sebastián: Exit through the gift shop (Salida a través de la tienda de regalos). Un protagonista invisible, pues parece ser que en ningún momento aparece su imagen en el film. Eso sí, él lo dirige todo. En el Festival de cine de Berlín de este año habló ante las cámaras, pero lo hizo envuelto en un manto negro, con una capucha que ocultaba su rostro, y con la voz distorsionada. Continúa el misterio. Un maestro de la autopromoción, este Banksy, que juega como nadie con el mercado al que dice deplorar.

Os ofrezco un trailer de la película.